Cuanto más pequeño el pueblo, más grandes los secretos.
De la autora
de la trilogía Wake, Fade, Gone, Lisa Mcmann, llega Cryer´s Cross. Lo primero
que me llamó la atención de él fue por supuesto su autora, de la cual solo
conozco la trilogía anteriormente mencionada, que me encantó, eso y una tapa
con la promesa de un libro de miedo hizo que me comprara estas 282 páginas de
letra generosa que prometían entretenerme un par de tardes.
Kendall
Fletcher, vive en una granja en Cryer´s Cross, un pueblo muy pequeño, en el que
ni siquiera el equipo de fútbol tiene sus once jugadores reglamentarios. Las
pequeñas proporciones del pueblo, situado en el estado de Montana, hacen
aparecer en el lector cierta sensación de claustrofobia que aumentará a medida
que las páginas pasen.
Tiffany Quinn (Vaya nombrecito) ha desaparecido, a si empieza esta historia, con una desaparición inexplicable que hace que todo el pueblo se movilice en una búsqueda sin frutos que afecta a toda la localidad y marca de una manera especial a Kendall, que afectada por su acuciante TOC, no puede parar de contar árboles, coches, animales… durante esta búsqueda. Pasan los meses y poco a poco todo se olvida, unos nuevos vecinos llegan al pueblo, la familia Obregón, Jacián y su hermana se unen a las clases y equipo de Kendall, la que no puede evitar que este chico con nombre de telenovela le caiga mal por su cara de malas pulgas. A si transcurren los días en Cryer´s Cross, días en los que Kendall comienza a notar a su amigo/novio Nico cada vez más evasivo y alejado de la realidad, le preocupa que sea por su causa, o pero aún, un mal mayor que no pueda evitarse. La mañana que Nico no aparece en su casa y su coche se encuentra abandonado en las puertas de la escuela, todo el pueblo se teme lo peor, sobre todo Kendall, que comienza una búsqueda sin pausa por esclarecer que ha ocurrido con su mejor amigo y cual es la verdadera esencia de ese pequeño pueblo en el que todo el que desaparece, jamás es encontrado.
Si esperas una
verdadera historia de miedo este no es el caso, podrás apagar la luz sin temor
a tener pesadillas. El personaje de Kendall es interesante, sobre todo el hecho
de su TOC que nos hace poner en tensión en los momentos más intrigantes del
libro. Pero la historia que comienza con un gran ritmo, pierde fuelle a la mitad
por culpa de los temidos enredos amorosos, que nos hacen perder el hilo, y que
se precipiten sin demasiado timo los acontecimientos en sus últimas páginas. No
mantiene la tensión que es requerida, y que hubiese creado la atmósfera ideal
para la novela que tenía todos los ingredientes deseados pero que no ha sabido
aprovecharlos. La historia de amor está en mi opinión metida con calzador, y no
aporta nada al tema principal.
En
definitiva, un prometedor libro, con un buen comienzo que va perdiendo fuelle,
hasta terminar de manera un poco apresurada. No aprueba para mi Lissa Mcmann
con su primer libro después de la trilogía Wake. Espero que con su próxima
novela la experiencia sea más grata.
Debe de ser una manía mía pero no me gusta mucha Lisa Mcmann... No creo que lo lea.
ResponderEliminarUn besito y te sigo ^.^
Yo quiero leerlo, de esta autora solo he leido Sueña y me gusto.
ResponderEliminarBesos
Buena reseña, aunque no creo que lo lea.
ResponderEliminarBesos, te sigo.
Hasta ahora no he leído nada de esta autora y ha sido porque las críticas que he leído sobre su trilogía no han sido muy buenas, pero veo que a ti te han gustado, a ver si a mi también.
ResponderEliminarEste libro la verdad es que tenía muy buena pinta, es una pena que pierda el ritmo y que el romance no sea relevante.
Muchas Gracias por la reseña
Besitos ^.^